Obreros bananeros en Nicaragua
Sintomatología de las enfermedades
Sandra Amador, médica del Centro de Salud de los obreros del banano de El Viejo dice “Mis investigaciones muestran claramente que los productos químicos de fumigación matan”.
Hasta allí, a aquél Centro de Salud de solo una sala de consulta vienen mujeres, niños y hombres a curar sus males. Aquí la tarifa es la mitad de la corriente. En lo posible, Sandra trata de ayudar con remedios gratuitos. Logra mantener funcionando la clínica, con ayuda del sindicato y un apoyo económico de Holanda.
-Mi experiencia me dice que la situación aquí
en El Viejo no es normal. No
cabe duda.
Durante los últimos seis meses pasados, se murieron
6 pacientes de cáncer de la matriz. Se les extirpó la matriz a doce mujeres. Todas tenían menos de 27
años de edad y eran trabajadoras del banano. De las
pacientes de otras categorías, ninguna ha sufrido de
cáncer de la matriz, durante este período.
Sandra es una de las pocas médicas que se atreven a hablar y decir lo que pasa. Hay un fuerte interés de que no se comente la situación por parte del gobierno, del partido de oposición el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y de las empresas bananeras. Varios médicos han optado por callarse la boca por miedo de perder el trabajo.
-He efectuado exámenes de sangre que muestran que las mujeres tienen un alto contenido de insecticida en la sangre. Se han producido muchos abortos, niños deformados, sin cerebro, sin cabeza…
Todavía no se ha probado científicamente que los insecticidas causen el cáncer. Sin
embargo está probado que el veneno
DCPB causa esterilidad, pérdida de pelo y uñas
y degeneración de la piel. El DCPB ha sido usado frecuentemente
en las bananeras de Nicaragua desde el principio en 1968 hasta
1992. Esto a
pesar de estudios que comprobaron ya en 1958 que el insecticida era peligroso. En los Estados
Unidos se
prohibió el uso del DCPB en 1977,
pero se continuó con su exportación. Estudios efectuados en Nicaragua han mostrado un alto índice de esterilidad entre los obreros.
De 100 obreros, 67 son estériles, total o parcialmente.
-Un problema es que las mujeres no quieren que
médicos hombres les hagan exámenes
vaginales. Hay también médicos
en las plantaciones, pero a
menudo son completamente desconsiderados y actúan solo a favor de la patronal.
-Otro problema es que no tenemos dinero para hacer estudios
avanzados, acerca
de la conexión entre los insecticidas
y el cáncer. Apenas tenemos dinero para lo básico.